Préstamos Hipotecarios
¿Qué son los préstamos hipotecarios?
El préstamo hipotecario es la deuda que se tiene que pagar y la hipoteca es la garantía de que esa deuda se pagará.
En resumen, los préstamos hipotecarios son contratos donde se presta una cantidad de dinero para adquirir una vivienda, y este importe tiene que ser devuelto con unos intereses específicos dentro de un plazo establecido.
Características generales de los préstamos hipotecarios
A continuación, te los presentamos las características de los préstamos hipotecarios:
- Siempre habrá un inmueble en el centro de esta operación.
- Los préstamos hipotecarios se asocian a una cuenta corriente donde se irán cobrando las distintas cuotas a pagar.
- Antes de otorgar el préstamo, las entidades analizan la viabilidad sobre la capacidad de pago de quién pide el préstamo, para así evitar complicaciones.
- Es una de las operaciones financieras más seguras para las entidades porque se tiene una vivienda como garantía real.
- Usualmente, la cuota a pagar, será aproximadamente del 35% de los ingresos netos mensuales de las personas que lo solicitan.
Cabe destacar que estas son las características generales más comunes, sin embargo, cada entidad financiera tendrá sus propias condiciones y especificaciones. Por lo que es muy importante recurrir a un comparador de hipotecas y así decidir entre las diferentes entidades que te ofrecen esta operación.
Tipos de préstamos hipotecarios
Los préstamos hipotecarios se clasifican de acuerdo al tipo de interés que se elija en la hipoteca, es decir, el tipo de cuota que paguemos. A continuación, te presentamos los 3 tipos de préstamos hipotecarios más comunes:
- Hipoteca fija: Esta hipoteca mantiene el mismo interés y la misma cuota mensual durante toda la vida del préstamo. Cada entidad establece el tipo fijo de sus hipotecas y las mejores hipotecas fijas suelen ser aquellas en las que se domicilia la nómina para conseguir un tipo de interés más bajo y una mejor cuota mensual.
- Hipoteca variable: La particularidad de esta hipoteca es que su tipo de interés puede cambiar. El interés de las hipotecas variables cuenta con dos elementos; una parte fija que es la que establece el banco y una parte variable (los índices de referencia económicos). El banco establece un porcentaje fijo de interés al que se tendrá que sumar la parte variable.
- Hipoteca mixta: Esta hipoteca combina un periodo con el interés a tipo variable con un periodo con el interés a tipo fijo. Habitualmente se empieza pagando un interés fijo durante los primeros años y el resto se termina pagando con interés variable. Por tanto, una hipoteca mixta contará con dos tipos de interés: uno fijo (TIN) establecido por la entidad para el periodo de hipoteca fija y otro variable (diferencial + índice de referencia) que cambiará según las fluctuaciones del Euríbor y otros agentes económicos externos.
Ventajas sobre los préstamos hipotecarios
- Múltiples usos: Además de utilizarlo para comprar una vivienda, también puedes usarlos para remodelar tu casa.
- Tasa de interés bajas: Así ayudan al pago correcto de las cuotas.
- Plazo de los préstamos: Los préstamos son a largo plazo (generalmente entre 15 y 30 años) lo que implica que las cuotas se acomodan a tus ingresos.
- Importes de dinero más elevado: Los préstamos hipotecarios otorgan más financiación en comparación con otros préstamos.
Desventajas sobre los préstamos hipotecarios
- Gastos extra: Hay varios gastos asociados con la adquisición de un préstamo hipotecario.
- En caso de impago: la garantía de devolución del préstamo sería el propio inmueble.
- Intereses de retraso: Si hay atraso en los pagos, se generan intereses de mora, los cuales regularmente son muy altos.
- No cubren todo el valor: Algunas hipotecas sólo cubren el 80% del valor de tasación del inmueble.
Pese a que estas desventajas pueden suponer grandes limitaciones para nosotros, recuerda que la mejor manera de cubrir un préstamo hipotecario es tener una estabilidad económica a largo plazo y estar siempre en contacto con la entidad para describir tu situación financiera.
Requisitos para los préstamos hipotecarios
Los requisitos para los préstamos hipotecarios son muy meticulosos, sin embargo, la mayoría de las entidades te asesoran y te llevan paso a paso para comprobar que cumples con los requisitos para adquirir uno. Te mostramos los requisitos más generales que se piden en esta operación:
Ser mayor de edad, hasta los 75 años.
- Tener un trabajo estable.
- Tener ahorros previos. Los bancos te piden tener un 20% o 30% del precio del inmueble.
- En caso de tener complicaciones con el banco, usualmente se pide un aval como garantía en caso de posibles impagos.
- Usualmente, se pide no tener compromisos financieros, como pueden ser otros préstamos personales.
En el estudio de viabilidad, las entidades quieren analizar tu perfil y saber si cumples con todos los requisitos. Además de ello, también analizan las condiciones de la vivienda que quieres adquirir y llevan a cabo los siguientes pasos:
- Un informe de tasación de la vivienda
- Comprobación registral (nota simple)
- Recopilación de su patrimonio en el momento de solicitar el préstamo hipotecario, como pueden ser otros inmuebles, coches, inversiones, cuentas, etc.
Además, en caso de tener préstamos en otras entidades, también indagarán en la CIRBA y ASNEF si no has tenido impagos o si estás clasificado en listas de morosidad.
Documentación para préstamos hipotecarios
Las entidades piden documentación muy específica, dependiendo de las condiciones de tu préstamo hipotecario, a continuación te mostramos los documentos que generalmente se piden:
- Documento de identificación
- Contrato o documento de vida laboral actualizado
- La última declaración de IVA si trabaja por cuenta propia
- Última declaración de la renta
- Últimos movimientos bancarios
- Escrituras de otras propiedades, si las hubiera
- Justificante del pago de otros préstamos
- Justificantes de otros ingresos
FAQs Préstamo hipotecario
Un préstamo hipotecario es un tipo de financiación a largo plazo que se concede para la compra, construcción o reforma de una vivienda. La garantía del préstamo es el propio inmueble, lo que da mayor seguridad a la entidad financiera y permite acceder a importes más altos con plazos extensos.
¿Qué es un préstamo hipotecario?
Un préstamo hipotecario es un contrato mediante el cual una entidad financiera presta dinero para adquirir una vivienda, que debe devolverse con intereses en un plazo determinado. La hipoteca funciona como garantía de pago: si no se cumple, el inmueble puede ser embargado.
¿En qué se diferencia un préstamo hipotecario de una hipoteca?
El préstamo hipotecario es la deuda adquirida, mientras que la hipoteca es la garantía (la vivienda) que respalda dicho préstamo.
¿Cuáles son las características principales de un préstamo hipotecario?
Un préstamo hipotecario siempre está vinculado a un inmueble y las cuotas se cargan directamente en una cuenta corriente del solicitante. Antes de concederlo, el banco analiza la capacidad de pago del cliente, ya que se trata de una operación segura para la entidad al estar respaldada por la vivienda. Generalmente, la cuota mensual no supera el 35% de los ingresos netos del solicitante, garantizando así un nivel de endeudamiento sostenible.
¿Qué tipos de préstamos hipotecarios existen?
Existen diferentes tipos de hipotecas según la forma en que se aplica el interés. La hipoteca fija mantiene un interés y una cuota estables durante toda la vida del préstamo, lo que aporta seguridad al cliente. La hipoteca variable combina un interés fijo inicial del banco con un índice de referencia, como el Euríbor, que puede fluctuar con el tiempo. Por su parte, la hipoteca mixta ofrece un interés fijo durante los primeros años y después pasa a un modelo variable, adaptándose a la evolución del mercado.
¿Qué ventajas tienen los préstamos hipotecarios?
Los préstamos hipotecarios permiten comprar, reformar o invertir en una vivienda, ofreciendo condiciones más ventajosas que otros tipos de financiación. Suelen contar con intereses más bajos, plazos largos que pueden ir de 15 a 30 años y la posibilidad de acceder a cantidades de dinero más elevadas. Todo esto los convierte en una herramienta clave para quienes buscan financiar proyectos inmobiliarios de gran valor.